El cine y los libros nos necesitan
«La cantidad de asistentes llegó a 586,900, que es 4% adicional en comparación con el año anterior, convirtiéndose en la cifra más alta en todas sus ediciones».
«El Perú es uno de los mercados latinoamericanos más pequeños, con sólo unos cuantos distribuidores y expositores activos, pero el número de pantallas está aumentando. A nivel nacional era de 661 en el 2018 y llegarían a sumar 789 para el 2023».
Como podemos ver, el 2019 fue el año perfecto para la cultura y el entretenimiento. Sin embargo, con la llegada del covid-19 todo se detuvo. Conforme pasaron los meses, diversas industrias comenzaban a resurgir y reinventarse para poder subsistir. Pero, ¿qué estaba pasando con los libros y cines?
Tras meses de asistir a presentaciones de libros de forma virtual y comprar nuestros ejemplares en librerías online, la industria está volviendo a nacer. Actualmente se viene desarrollando la I Feria del Libro Augusto Tamayo Vargas en la plaza Túpac Amaru en Magdalena. El país invitado de honor es Ecuador.
Todos los stands participantes se encuentran al aire libre, y se controla el ingreso de los asistentes con las medidas de bioseguridad. Este es el primer paso hacia la reactivación económica del sector. Se espera que de pie a futuras ferias presenciales o en formato mixto (virtual/presencial). Sandra Mariella Boza, gerente de Desarrollo Humano de la Municipalidad de Magdalena del Mar, mencionó durante la inauguración del evento:
“Estamos convencidos de que la lectura y el libro son el mejor soporte emocional. Ellos nos hacen más llevadera la coyuntura actual de emergencia sanitaria”
Si nos enfocamos en la industria del cine en nuestro país, los complejos llevan cerrado más de 15 meses. Debido a que el protocolo de reapertura excluye la venta de alimentos. Sin embargo, dicha venta forma parte de un gran porcentaje de las ganancias que ellos obtienen:
En vista de ello, la ANASACI (Asociación Nacional de Salas Cinematográficas) hizo un llamado al Ministerio de la Producción, Ministerio de Cultura y Ministerio de Salud, para obtener apoyo. Las cadenas de cines, los distribuidores y fans del séptimo arte se están uniendo para alzar la voz ¿El motivo? Más del 30% de las salas podrían cerrar debido al tiempo que están inoperativas. La asociación indicó que las pérdidas ya ascienden a más de US$ 300 millones, como lo menciona su presidenta, Mónica Verdeguer, a RPP:
“El estar cerrados no significa que no acarreen gastos para mantener los equipos, y eso multiplicado por 15 nos da una cifra con la que volamos”.
Respuesta del Community Power de la industria
El Community Power (clave 5) son los fans de verdad. Aquellas personas que están dispuestas a realizar acciones que van mucho más allá de una compra. En resumen, ven a tu marca/empresa como su lovemark. Ellos los defenderán y apoyarán en diversas situaciones.
Por un lado, desde el anuncio de la Feria Internacional del Libro de Lima Virtual del 2020, el Community Power demostró su apoyo en las redes sociales. Compartieron los eventos y su participación en las actividades. Además, muchos stakeholders se unieron a la celebración por los libros con notas previas, durante y post evento. Algunas también se compartieron en redes sociales:
? ? El concierto musical de la Feria del Libro de Lima con el talentoso DJ Tito Silva ha sido un homenaje posmoderno a la literatura peruana, con referencias a Arguedas, María E. Cornejo, Vallejo, Varela. (ah, y hubo un sanmarquino detrás de esto). #FILLima2020 pic.twitter.com/kBqMY9oljc
— Américo Mendoza-Mori (@ameriqo) August 28, 2020
Hoy empieza la #FILLima2020, modalidad virtual. Charlas, diálogos, debates, presentaciones. Volver a estar juntos a través de las páginas. En esta difícil coyuntura, pese a todo, el libro se abre paso.
Podrán encontrar aquí toda la programación https://t.co/RPCn2b7UjI
¡A leer! pic.twitter.com/tlq5SnCaN2— Johann Page (@johannsaari) August 21, 2020
? El ministro de Cultura inauguró la Feria Internacional del Libro de Lima #FILLima2020 ?
"La virtualidad permite que la Feria Internacional del Libro de Lima sea para todo el Perú", indicó el titular del sector. pic.twitter.com/aSWw8izKpX
— Ministerio de Cultura (@MinCulturaPe) August 21, 2020
En tanto, con el anuncio de la I Feria del Libro Augusto Tamayo Vargas, las reacciones no se hicieron esperar. Fanáticos de los libros y diversos medios de comunicación vienen compartiendo noticias y comentarios en el día a día:
¡Por fin nos reencontraremos ??!
Desde el martes 22 de junio hasta el domingo 4 de julio (11am – 8pm) los esperamos en la Plaza Túpac Amaru, para compartir nuestras novedades editoriales en la #FeriaDelLibroDeMagdalena "Augusto Tamayo Vargas" ?
Ingreso libre.
¡Nos vemos ??! pic.twitter.com/wla5QrU4uQ
— Estación La Cultura (@EstacionLc) June 22, 2021
Respecto a los cines, se creó Que empiece la función, una agrupación de representantes cuyo objetivo se centra en volver a operar. Entre los miembros encontramos a su Community Power y Stakeholders conformados por seguidores, trabajadores de cines y distribuidoras, actores y actrices peruanos. Todos ellos alzan la voz con el objetivo de reactivar el sector. Pueden ver las publicaciones con el hashtag #QueEmpieceLaFunción en Twitter, Instagram y Facebook.
Por otro lado, esta semana ha empezado una nueva campaña: #NoDejemosMorirElCine. El Community Power está participando activamente en ella. Pero no son los únicos, medios como RPP, El Comercio, Business Empresarial publicaron notas en apoyo y difusión. Una de las más resaltantes es la entrevista que se hizo con la vocera de Anasaci, Diana López. Ella precisó que las salas de cine están dispuestas a operar con el 30% del aforo y los protocolos de bioseguridad necesarios:
Diana López, vocera de la Asociación Nacional de Cines en Perú (Anasaci), señaló que tras 15 meses inoperativo, el sector está "al borde de la quiebra".https://t.co/mp2UaWBM67
— RPP Noticias (@RPPNoticias) June 17, 2021
Cómo sobrellevan la crisis en otros países
En ningún país es sencillo superar la crisis provocada por la covid-19. Más aún en el sector cultural y de entretenimiento. Millones de salas de cine, teatros y ferias de libros tuvieron que cerrar sus puertas durante meses. Sin embargo, poco a poco fueron reabriendo y tratando de afrontar la nueva normalidad con protocolos de bioseguridad. Un análisis presentado por El Mundo afirma que:
Prácticamente cualquier producto cultural que no sea envasable en algún tipo de software y transportable hasta algún dispositivo electrónico conectado a internet, lleva 15 meses en hibernación. No ha habido conciertos, actuaciones teatrales, exposiciones, cines, ni exposiciones en museos, salvo en contadas ocasiones y con medidas de seguridad extremas. La cuestión, ahora, es cómo será el despertar de la cultura.
Con el paso de los meses, hemos podido conocer más respecto al covid-19 y su forma de transmisión. En España, por ejemplo, La Comisión Organizadora de la Feria del Libro de Madrid acordó que la nueva edición sería en junio, siempre y cuando se den las condiciones sociosanitarias que permitan su celebración, de manera presencial, bajo los controles de aforo. (Según informa El País).
En noviembre del año pasado se dio la apertura de las salas de cine en Colombia. El Tiempo publicó una nota con todas las medidas y restricciones que se llevarían a cabo. Es importante destacar que se autorizó la venta de alimentos y bebidas de manera presencial, conservando el distanciamiento físico de dos metros entre personas.
«Los alimentos y bebidas comprados por los asistentes se deben entregar empacados, de tal manera que no estén expuestos al medio ambiente mientras los asistentes transitan hacia su ubicación. […] Asimismo, se deben regular y demarcar las zonas de ingreso y evacuación, en las que las filas mantengan una distancia mínima de dos metros entre personas para evitar aglomeraciones. Las locaciones, además, deben seguir dotadas de manera permanente y suficiente de agua potable, jabón líquido y toallas desechables para el lavado de manos, entre otras disposiciones».
La situación de los cines en Perú
Perú es el único país de la región que no cuenta con sus salas abiertas. Mónica Verdeguer, directiva de ANASACI, precisó lo siguiente:
«Estamos sumergidos en una brutal crisis económica y lo que es peor aún sin luz pues no hay una fecha de reapertura fijada. […] No matemos al cine que solo busca dar sano entretenimiento a la familia peruana”
Además, ANASACI afirma que la evidencia científica es clara, ya que un análisis global encargado por Celluloid Junkie, confirmó que en ninguno de los países con cines abiertos se ha reportado brote, cuyo origen haya sido una sala de cine.
Otro análisis realizado por la consultora ambiental Nakamura certifica que, el aire al interior de las salas, con el aforo especificado y siguiendo todos los protocolos de bioseguridad, es un ambiente libre de riesgos y con calificación aprobatoria. El estudio fue realizado en una sala de cine, con un aforo de 40%, y con todas las personas comiendo canchita y tomando gaseosa.
Mi conclusión
La cultura no puede parar, pero sí puede transformarse. Y esto se demostró desde marzo del año pasado cuando se decretaron las cuarentenas en diversos países del mundo, a raíz del coronavirus. Con el paso de los meses se fueron presentando más estudios, análisis y evidencia científica sobre la covid-19, lo que permitió una reactivación progresiva de diversas industrias. Más de 15 meses después, los libros y el cine continúan en una crisis debido al pare de ferias de libros y salas de cine.
El Community Power de ambas industrias cumple un rol importante para alzar la voz cuando más se necesita. Los libros están empezando a retomar su presencia, con eventos en vivo y mixtos. Sin embargo, los cines aún no encuentran una solución. Son miles de fanáticos, celebridades y stakeholders quienes se han sumado a las diversas campañas esperando que su voz sea escuchada. Algo importante a destacar es que los cines, los distribuidores y la industria en general se han dado cuenta que es momento ideal para conectar con nuestras audiencias y fortalecer su Community Power. Esperemos que pronto encuentren una solución a sus pedidos.
¿Qué opinan cafeter@s?