Uno de las tipos de marketing viral, es el llamado boca-oreja. Es una importante promoción que no implica presupuesto, sólo ofrecer un buen producto para que nuestro cliente satisfecho haga el resto.
Juan Infante, un sociólogo destacado, que tiene entre sus logros el haber sido líder en el pujante emporio de Gamarra, donde creó y difundió por casi 6 años la revista del mismo nombre, es quien brinda asesoría directa en la sala de su casa a grupos de profesionales que, reunidos, intercambian ideas, inquietudes, frustraciones y proyectos de negocio, que son analizados en cada sesión en la que Juan enfoca el proyecto y lo encamina para su ejecución.
Éste no es un taller de Plan de Negocios con la rigurosidad que encontraríamos en un instituto o escuela de Post Grado donde se miden factibilidades numéricamente, se ve análisis financiero profundo, y temas logísticos detalladamente que están incluidos en un plan formal. En Diempresa de hecho se habla de negocios, y mucho, pero considerando el perfil de profesionales que asisten, muchos de ellos ligados a las artes y las letras, el lenguaje, los ejemplos y los casos, son bastante didácticos y prácticos como para que hasta un artista que odia los números y no sepa cómo poder vivir de su arte, pueda encontrar el camino asegurando su estabilidad financiera.
Muchas ventajas de un taller con Juan Infante, el grupo que se forma suele ser nutrido, «bien taipá», y el networking que podemos lograr es también interesante, la mayoría son profesionales con mucha trayectoria, pero como dependientes.
Y las experiencias de Juan son bastante aleccionadoras. Considerando que fue designado por la revista TIME y CNN como uno de los 50 futuros líderes de Latinoamérica, y que ha trabajado codo a codo con el Premio Nobel de la Paz, Muhammad Yunus, este taller de negocios está para aprovecharlo al 100%.
Un punto importante que aprendí en Diempresa -y viendo mi caso personal- es que el emprendimiento no sólo lo encontramos en los empresarios que vienen de estratos sociales bajos o que no tuvieron acceso a una educación completa -y que sin embargo logran triunfar-; hay también profesionales, con estudios y logros que optan por un camino diferente, independiente, lleno de dificultades pero con las mismas ganas de emprender y lograr algo propio. La raza y el empuje son la constante inherente a todo emprendedor.
Su primer rumbo fue el de la ingeniería y, aunque cambió de dirección hacia su verdadera pasión, la publicidad, el aprendizaje en las aulas de Estudios Generales Ciencias de la PUCP fue clave para su trabajo en estrategias.
En 1997 se gradúa como publicista en el IPP, y luego decide terminar también su carrera universitaria como comunicador en la PUCP (2001). Trabajó en tan diversas áreas de la comunicación que la mejor manera de integrarlas fue a través de un máster en Dirección de Comunicación en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona (2007), donde desarrolló aún más sus habilidades de interacción con diferentes públicos.
Tras su experiencia como Director Online en Llorente & Cuenca, y Jefe del Canal Virtual de Claro Perú -puestos a los que llegó por el trabajo en su blog, CAFÉ TAIPÁ- decidió lanzar su propia consultoría desde abril del 2012, con el mismo nombre.