Empiezo a pensar que debería paralizarse toda Lima por esta feria. Que todos los peruanos deberíamos pedir vacaciones en estos días y disfrutar. Lo comento ahora, que apenas he podido ir una vez, y al estar dentro en lo primero que pensé no fue en comida, sino en fiesta. Y eso que era el primer día, y eso que no estaba tan llena la feria todavía, pero el mundo al que entras cuando vas a Mistura es de otra dimensión. Es que ya no sólo disfrutas con el gusto en cualquier restaurant o carretilla que encuentres, son todos tus sentidos los que se deleitan, con el ambiente multicolor y la inmensidad de una Feria que cuando Gastón dice que tiene que ser la mejor del mundo, lo encuentro absolutamente verosimil.
Recuerdo la carta de Gastón cuando hablaba de los cocineros como «auténticos soldados de la patria» y sí pues, eso son, y cada vez aumentan en cantidad y en coraje. Mistura es ya un sinónimo de Perú, pero no de cualquier Perú, sino del mejor, del país unido, del país que cree.
He escuchado a alguna gente decir que no le gustan las aglomeraciones, que no soporta las colas, que quieren comer tranquilos. Hay quienes dicen que mejor se van a los restaurantes en sus locales de siempre, que por qué van a pasar la incomodidad de estar haciendo una cola para el mismo plato que lo pueden conseguir ya mismo en otra parte. ¿Pero qué les pasa? ¿Es que no se dan cuenta de que Mistura es mucho más que eso, que nuestra feria es un grito hacia el Mundo, que buscamos que en algunos años asistan millones de turistas en búsqueda de una de las cocinas más exquisitas del planeta? Frente a ese grito que nuestros soldados de blanco lanzan pregonando el mejor arroz con pollo, el pan con chicharrón, el cebiche de conchas negras y tantísimos platos que de sólo pensar me quitan ya el sueño de esta madrugada, frente a ese clamor de nuestros hermanos, lo mínimo que debemos hacer es un eco inmenso, porque es irresponsable ser indiferente y callar cada setiembre en el que el Perú rompe sus propios paradigmas y sorprende.
En este Café no sé si ha habido algo de Marketing, la verdad es que hay mucho más que eso, hay sentimiento, y este es el que nos lleva a la acción. Mistura tiene que ser una lovemark no sólo para los peruanos, sino para el mundo. De nosotros depende.
Volveré con más. Mistura y el Perú lo merecen…
Su primer rumbo fue el de la ingeniería y, aunque cambió de dirección hacia su verdadera pasión, la publicidad, el aprendizaje en las aulas de Estudios Generales Ciencias de la PUCP fue clave para su trabajo en estrategias.
En 1997 se gradúa como publicista en el IPP, y luego decide terminar también su carrera universitaria como comunicador en la PUCP (2001). Trabajó en tan diversas áreas de la comunicación que la mejor manera de integrarlas fue a través de un máster en Dirección de Comunicación en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona (2007), donde desarrolló aún más sus habilidades de interacción con diferentes públicos.
Tras su experiencia como Director Online en Llorente & Cuenca, y Jefe del Canal Virtual de Claro Perú -puestos a los que llegó por el trabajo en su blog, CAFÉ TAIPÁ- decidió lanzar su propia consultoría desde abril del 2012, con el mismo nombre.
Este año Mistura estuvo espectacular!! muy bien organizado, comida excelente..FELICITACIONES!…y no podia faltar una chela bien helada…http://es.wikipedia.org/wiki/Cerveza_Pilsen_Callao…LA CLASICA!