En el mundo del deporte, la imagen y la comodidad son claves para el rendimiento. Sin embargo, en ocasiones, la línea entre la moda y la funcionalidad se difumina, generando debate. A principios de abril, la reconocida marca deportiva Nike, se encontró en una controversia por supuestamente lanzar uniformes femeninos que muchos atletas y aficionados consideraron excesivamente reveladores e incómodos. Se trató de uno de los 50 diseños que presentó para la selección de atletismo de Estados Unidos para los Juegos Olímpicos de París 2024. Las críticas no tardaron en llegar, calificando el uniforme como “sexista” y una falta de respeto hacia las deportistas. El cuestionado diseño tenía un corte alto y revelador en la zona de la pelvis, lo cual provocó un debate sobre los estereotipos de género y la objetivación del cuerpo femenino. Pero, ¿cuál fue la reacción tanto de la comunidad como de la marca frente a esta situación? ¿Qué lecciones hay detrás de esta controversia? Un diseño que encendió las redes sociales de Nike La reacción en redes sociales fue inmediata. La comunidad de Nike rechazó el diseño, acusando a la marca de sexualizar el cuerpo de las deportistas y limitarlas a meros símbolos de atracción, incluso señalando una falta de igualdad si comparaban los trajes con los del equipo de atletas masculinos. Exatletas como Laura Fleshman, también se unieron a la conversación en Instagram, expresando que este tipo de atuendos solo «perpetúan estereotipos patriarcales e impiden maximizar el rendimiento deportivo». La postura de Nike: respuesta a las críticas La marca emitió un comunicado oficial, aclarando que el diseño controvertido, al igual que las otras 50 piezas deportivas, se desarrollaron considerando la opinión de los atletas y buscando que las prendas satisfagan sus necesidades, ofreciendo una amplia gama de opciones sin comprometer la comodidad durante la competición. Un análisis desde una mirada reputacional Esta controversia, podemos analizarla bajo la metodología de las 6 claves del marketing de reputación de Café Taipá. Nike es conocida por fomentar valores como la inclusión, la equidad y el empoderamiento femenino a través de campañas como “Juntas Imparables”, apoyo a atletas femeninas o diseño de productos para diferentes tipos de cuerpos. Por ello, se generó polémica cuando presentaron esta colección de trajes que no iba alineada con la cultura que promueven. La discusión en torno a la polémica de Nike y sus uniformes femeninos es un reflejo del actual contexto social, en donde existe una creciente conciencia sobre la importancia de la igualdad de género y la necesidad de tomar medidas para abordarla, así como también el creciente rechazo a la cosificación de la mujer en la publicidad y en las industrias de la moda. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de Viu?! (@viu_elcomercio) La comunidad de Nike es clave. Ante el descontento o críticas hacia la colección de trajes, Nike tenía la responsabilidad de abordar estas preocupaciones de forma proactiva a través de una comunicación más sensible y empática. Al hacerlo, la marca habría demostrado compromiso con sus stakeholders, especialmente con sus seguidores, cuya lealtad y apoyo desempeña un papel fundamental en su reputación y su éxito a largo plazo. Explorando la controversia: ¿qué opinan los expertos? Según Carla Medina, deportista y comunicadora, es poco probable que Nike haya diseñado la prenda con intenciones exhibicionistas considerando la seriedad de la marca. Además, agrega lo siguiente: “Es posible que no hayan anticipado lo incómodo que podría resultar el diseño para muchas atletas, especialmente por el talle alto. Podría haber sido útil realizar un testeo general con la delegación completa de Estados Unidos para obtener una retroalimentación más representativa”. Para Carla, la clave para abordar estas situaciones dentro de las empresas se encuentra en la información. Destaca la importancia de comprender las problemáticas que enfrentan las mujeres, desde el acoso hasta la hipersexualización para tomar medidas más adecuadas. Esto implica no solo diseñar productos cómodos y seguros, sino también implementar políticas laborales que brinden tranquilidad a las mujeres. Consecuencias de un diseño controversial: 3 lecciones aprendidas 1. Escucha, actúa y triunfa. Solo cuando entendemos las necesidades y expectativas reales de nuestros diferentes stakeholders, podemos tomar decisiones más acertadas y construir una marca que fortalezca nuestro community power. Nike podría haber evitado la polémica si hubiera tenido en cuenta las preocupaciones sobre la igualdad de género que podrían producirse por la confección de un traje considerado revelador. 2. Diseño con Propósito. Es importante recordar que el diseño de productos no es solo estética, es también un statement, porque refleja la cultura corporativa de la empresa. Considerar la perspectiva de género en el diseño no es solo ético, sino también estratégico. Las marcas que abrazan la diversidad y la inclusión, y sobre todo, las practican en todas sus acciones, no solo ganan clientes, sino también mentes y corazones. 3. Comunicación Empática. En un contexto donde cada movimiento es seguido de cerca en las redes sociales, la comunicación empresarial debe ser más empática que nunca. En lugar de enfocarse en la variedad de diseños, Nike pudo haber demostrado una comprensión más profunda de las preocupaciones expresadas por la comunidad. La autenticidad y la empatía son clave para una comunicación efectiva en tiempos de crisis. Mi conclusión La controversia de Nike y sus uniformes femeninos nos recuerda que escuchar a nuestra audiencia, diseñar con propósito y comunicar con empatía son pilares fundamentales para construir marcas sólidas y relevantes en la actualidad. Al entender las necesidades y expectativas de nuestro público, podemos forjar relaciones más significativas y duraderas. En un mundo que valora cada vez más la igualdad y la diversidad, las marcas que adoptan estos valores no solo prosperan en el mercado, sino que también generan un impacto positivo en la sociedad. Fabricio RiveraBachiller en Comunicaciones de Marketing por la Universidad de Piura (UDEP). Cuenta con 2 años de experiencia gestionando el contenido y las comunidades digitales de marcas del sector tecnología, entretenimiento, retail, inmobiliaria y restaurantes. Su principal