No es ningún misterio. Si tenemos que contar cuántos políticos nuestros ponen los objetivos nacionales delante de sus intereses propios, probablemente nos sobrarán dedos de una mano, y corremos el riesgo de ni siquiera usar alguno.
En cambio, si tenemos que ver emprendedores que habiendo empezado de cero, aporten directamente por el país, ahí si que el conteo se hará más fructifero; y si, además, buscamos a una persona que pudo acabar com político -era su futuro natural considerando a su padre ex Premier y senador-, pero prefirió ser cocinero, luego empresario y, desde su privilegiada posición, darse por completo para promover directamente el crecimiento del país, apuntando a quienes menos tienen, con olla y cucharón -pero sin cacerolazo de por medio- entonces nos bastará con uno: Gastón Acurio.
Esta joven cocinera vive en el cerro pero tiene dibujada una sonrisa. Está yendo a sus clases en la escuela de cocina Pachacútec, la obra social más importante de Gastón.
¿Los emprendedores, son los revolucionarios de nuestro siglo, los que se preguntan cómo cambiar el mundo desde las palancas del conocimiento y de la innovación? Ante ellos, los corporativistas, los que se oponen al cambio disfrazando intereses de palabras. El ejemplo por crear, por el esfuerzo, por el riesgo personal, por construir algo significativo, por huir de la mediocridad para enfrentar los grandes retos, me parece revolucionario. No creo que las líneas conservador o progresista pasen ya por el vector derecha /izquierda, esta dicotomía ya no alcanza.
Y recordando lo que dice Gastón en la entrevista de El Mercurio -rebotada hace días en La República– , cuando cuestiona inclusive a aquellas personas que se hacen llamar de izquierda pero desde su cómoda posición solo protestan y esperan favores, mientras atacan a todo empresario; o las personas de derecha que tildan de revolucionarios, extremistas y rompe-sistemas, a aquellos que proponen cambios estructurales para que el país tenga mejores condiciones para poder despegar, de pronto sí que estoy con Gastón cuando habla de ser de izquierda -de la real y no la ornamental- por darle una motivación social a todo crecimiento de un emprendedor.
Pero debo decir también -citando a Xavier y por mi propia experiencia- que la raza y el sentimiento de emprendedor no sabe de más direcciones y tendencias, que la de seguir creciendo ahí donde las cosas se ponen difíciles, donde nada está hecho, y donde tal vez empezamos nuestro camino solos, pero al final podemos y debemos avanzar en equipo. Digamos que ser un emprendedor social apuesta por un win to win nacional.
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Amigos con cafeína:
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Su primer rumbo fue el de la ingeniería y, aunque cambió de dirección hacia su verdadera pasión, la publicidad, el aprendizaje en las aulas de Estudios Generales Ciencias de la PUCP fue clave para su trabajo en estrategias.
En 1997 se gradúa como publicista en el IPP, y luego decide terminar también su carrera universitaria como comunicador en la PUCP (2001). Trabajó en tan diversas áreas de la comunicación que la mejor manera de integrarlas fue a través de un máster en Dirección de Comunicación en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona (2007), donde desarrolló aún más sus habilidades de interacción con diferentes públicos.
Tras su experiencia como Director Online en Llorente & Cuenca, y Jefe del Canal Virtual de Claro Perú -puestos a los que llegó por el trabajo en su blog, CAFÉ TAIPÁ- decidió lanzar su propia consultoría desde abril del 2012, con el mismo nombre.
Al respecto de los emprendedores, hace unas fechas, en la FL de Lima Norte, un expositor dijo algo que me dejó pensando: todo negocio parte de un «don», aquel talento en base al cual se levantan las iniciativas. Acurio lo tiene. Ojalá no lo frieguen más, pidiéndole que sea candidato a cualquier cosa política. Su don es el de enseñar con el ejemplo, el de «encontar» a otros… 🙂
Milton, me voy un poco por la tangente con mi comentario, pero en verdad es una curiosidad que me vino a la mente tras leer sobre emprendedores, publicidad, etc. Así como mesclando temas de publicidad y de emprendedores (o para expresarlo en lenguaje de este blog, así como quien mezcla cafe con leche), ¿podrías ilustrarnos con ejemplos de publicidad/marketing de emprendedores?
Las campañas que solemos comentar son de grandes empresas, pero quizás en tu experiencia puedas darnos algunos ejemplos de Pymes o emprendedores.
Saludos.
Bueno estimadísmimo Milton a todo esto viene muy bien lo que el gran Robby ralston comentaba en un post pasado: el pilar de un buen publicista, comunicador, marketero etc: es ser una «buena persona», asi de sencillo. qué involucra esto? : busqueda del bien común, lealtad y sensibilidad social a prueba de todo, siento al ver los comments de Gaston que en un país como el nuestro es un Must el ser social. La pobreza indigna sobremanera pero peor aún es la ausencia de oportunidades para salir de ella. cómo no sensibilizarse al ver la sonrisa de esa chica yendo a estudiar a la escuela de Gastón? Cómo no?
Enrique, perdona que conteste tan tarde, y de hecho, no podré corresponder como quisiera a tu interrogante. Pero te daré algunos datos sueltos que tengo en mente:
– En temas de marketing, la acción de Rolando Arellano como profesional de trayectoria y respetado, cuando hizo un acercamiento al consumidor peruano, a la real importancia de destacar lo nuestro como símbolo de identidad nacional, fue lo que dio paso a campañas de publicidad y marketing que porfían veían a la peruanidad como un diferencial a favor. La propuesta de Rolando acabó en ese gran centro comercial llamado MegaPlaza que es un símbolo de desarrollo y de la relevancia económica que tienen los emprendedores de Lima Norte.
– El caso de Kola Real, por ejemplo es uno de los favoritos para graficar hasta dónde puede llegar el emprendimiento de en la adversidad.
– La empresa Nova, de don Máximo San Román, lo mismo, este ingeniero, que además es inventor, partió de cero, y fue su inteligencia y humildad, las razones de su éxito.
Finalmente, aunque suene trillado, aunque ya haya escuchado por ahí que lo tildan de demasiado histriónico, una de las pocas personas que apuesta seriamente por los emprendedores,y que tiene una publicación que analiza varios casos de éxito de marketing en emprendedores, es Nano Guerra García. Pasa que hay quienes esperan que los grandes nombres, los reconocidos analistas de nuestro marketing y publicidad nos ilustren con casos de emprendedores de Polvos Azules o Gamarra, pero para ello tendrían que entrar en contacto con ellos, y que yo sepa, conozco sólo a uno que ha trabajado con los grandes, y que también le ha dado un espacio vital a los chicos: Rolando Arellano.
Nano Guerra García, en cambio, ha hecho de los casos de éxito de emprendedores, la base de su empresa, de sus congresos, y de sus capacitaciones, programas,etc. Si lees su libro «Los Secretos del Carajo», tendrás muchos casos de éxito de peruanos que se hicieron de la nada, y que aveces empíricamente, usaron el marketing mejor que ninguno, y ahora están muy bien posicionados.
Listo Enrique, espero haber respondido en parte a tu pregunta. ¡Gracias por visitar la mesa de Café Taipá!
Muy bonito lo que dice Gastón, pero por que no se hace caso y pone restaurantes a precios mas asequibles y no solo para pitucos?